Tijuana es una de las ciudades fronterizas más importantes de nuestro país, además de que se ha desarrollado una industria de turismos basada en el vino y la cerveza (lo cual nos llevó allá)… pero además de todo eso, Tijuana también es testigo de una lucha interminable en la frontera de mi país, es allí donde comienza un muro y terminan muchos sueños.

La experiencia de haber estado junto al muro que divide México y Estado Unidos fue muy fuerte para mí, no pude evitar pensar en el significado de ese muro… desde la separación de familia, la desigualdad de oportunidades, gobiernos peleando por un territorio, etc… En verdad que hay muy poco de belleza pero mucho de poesía en esta experiencia.
Como reflexión personal, lo único que realmente puedo hacer es seguir trabajando para derribar las barreras que nos distancian como humanos, el muro fronterizo es un ejemplo físico, pero hay muchos otros muros que nos dividen y que si podemos derrumbar, que solo dependen de nosotros mismos.
